17/3/19

POBRE PASTO SAN RAMON


Pasto San Ramón.

Antecedentes:
Desde la introducción masiva de semillas de pastos a la Republica Dominicana, a inicios de la década de los noventa por el programa “Prodeleste”, San Ramón (Urochloa decumbens CV Basilisk, ex Brachiaria decumbens CV Basilisk) ha sido la especie más sembrada. En Brasil, donde producen más del 90% de las semillas que siembra América tropical, hace más de dos décadas que no la recomiendan. Los brasileños prefieren Sinaí y sus híbridos, y variedades que hay en el mercado para suelos ácidos (Xaraes, Mulato II, Toledo, Paiaguas, MG 5, Piata, etc.

¿Por qué no recomiendan san ramón en Brasil?
Dos razones fundamentales, primero por la presencia en el follaje de las saponinas esteroidales protodioscina, diosgenina y yamogenina, compuestos ligados a la aparición de brotes esporádicos de fotosensibilización hepatogénica en animales en pastoreo. La concentración de saponinas es mayor en hojas y tallos jóvenes. Es decir que San Ramón bien manejada podría ser más peligrosa.
                                                           
Necropsis por fotosensibilizacion


La segunda razón es por la gran incidencia en ese país del salivazo, insecto que chupa la savia de las plantas y les inyecta una sustancia toxica que produce un efecto parecido a los herbicidas quemantes como glifosato y paraquat.  
                                                                   
La incidencia de ataques de salivazo es muy baja en La Republica Dominicana, comparado con Brasil y el resto de países de Americe tropical. Los salivazos presentes en esos países pertenecen a los géneros Zulia, Deois, Aeneolamia, etc., que son más virulentos que el de aquí, que es Prosapia biscinta. El salivazo dominicano es más benigno que los anteriores, además parece tener enemigos naturales que lo mantienen “a raya”. Algo similar sucede con la chinche del pasto (Blissus sp.), San Ramón es más susceptible que Sinaí y las demás braquiarias pero los enemigos naturales impiden que los ataques sean importantes.

Chinche del Salivazo

Salivazo del pasto.
 En el pasado se creía que la fotosensibilización era producida por la toxina esporidemina que es segregada por el hongo saprofito (no parasito) Phytomices chartarun. Este hongo se desarrolla en tejido muerto, en hojas y tallos secos. La confusión se debió a que los síntomas clínicos de los animales afectados por consumir San Ramón son similares a los observados en Nueva Zelanda en ovejas y vacas con eczema facial, que es una fotosensibilización secundaria producida al consumir pastos del genero Megathirsus (el género de la hierba de guinea) en los que estaba presente el hongo Phytomices chartarum.  Antes del 1985 la fotosensibilización se le achacaba a este hongo, más adelante se demostró que las saponinas son las responsables. Esto fue reconfirmado en el 2003 con el aislamiento de protodioscina, una de las saponinas toxicas (Low, 2015). San Ramón contiene hasta 20 veces más saponinas que las demás braquiarias, sin embargo, Sinaí, Humidícola y Ruzi (Urochloa ruzisiensis), pueden producir fotosensibilización hepatogénica. En República Dominicana la fotosensibilización ha sido más frecuente en ovinos y caprinos, que son más susceptibles, aunque hay casos confirmados en bovinos. Los animales parece que adquieren resistencia a la fotosensibilización y esta resistencia aparenta ser hereditaria. Muchos animales practican pastoreo selectivo, dan preferencia a material vegetativo viejo para evitar la intoxicación. Una medida preventiva de seguridad es tener en la finca por lo menos 30% de otro pasto que no sea San Ramón, para dar de comer a los aninales que resulten afectados por fotosensibilidad, ademas de tenerlos en la sombra.

Los ovinos y caprinos son mas susceptibles que los bovinos a la fotosensiblidad, por eso es mas frecuente en esos rumiantes menores.


Fotosensibilidad en vaca Holstein
Fotosensibilidad en oveja

                                                         



Lo preocupante con San Ramón es la fotosensibilización subclínica, los animales pueden perder peso, producir menos leche y hasta morir sin presentar síntomas, excepto anorexia.
                                                
¿Tiene San Ramón alguna ventaja? 
            Después de humidícola común San Ramón es el pasto mejorado más rustico y menos exigente en fertilidad de suelos. Si la ganadería se sigue manejando como hasta ahora, sin fertilizar los pastos, San Ramón seguirá jugando un rol de relevancia. Sinaí común y las mejoradas son superiores, pero más exigentes en fertilidad del suelo.  Están ”diseñadas” para suelos de mediana a alta fertilidad, no como San Ramón y Humidícola que crecen bien en suelos ácidos de baja fertilidad. Los ganaderos pueden sembrar San Ramón en sus fincas, pero el Estado Dominicano no debía subsidiar las semillas, si dan subsidios debían ser para especies como Buffel para zonas secas, Humidícola para zonas inundables o con suelos de baja fertilidad y Caña de Azúcar para todo el país. 
En México en lugar del empleo de mejoradores de suelos para hacerlos aptos y sembrar “las mejores especies” se opta por pastos como San Ramón adaptados a suelos muy ácidos e infértiles (Cook y colaboradores, 2005). Si no se reponen los nutrientes que extraen del suelo las Sinaí y las hierbas de guinea mejoradas, estas pueden desaparecer antes del 5to año. Esta es una de las razones de por qué este país es uno de los que consume más semillas de pastos en toda el área.




Manejo de San Ramón.
El manejo es más importante que la especie, San Ramón y Humidícola bien manejadas pueden producir más leche y más carne por animal y por tarea que una hierba de guinea Zuri (uno de los mejores pastos disponibles) mal manejada.
En producción animal intensiva en países tropicales no solo se habla del porcentaje proteína de los pastos, sino de digestibilidad y contenido energético porque definen mejor el valor nutritivo. Las investigaciones modernas estudian más las fracciones de proteína. San Ramón tiene muy buena proporción de las fracciones A + B1 de degradación rápida en el rumen. Aunque los ganaderos y técnicos dominicanos debemos curarnos del síndrome proteico que arrastramos desde hace décadas.
 Si bien la proteína es el ingrediente más caro en una ración, no es el más importante en el trópico, sino la energía, sobre todo para producción de leche. La energía está vinculada, al igual que la digestibilidad, a la fibra detergente neutro (FDN) y a la fibra detergente acido (FDA). Los pastos e hierbas de corte pasadas que comen nuestras vacas tienen más de 70% de FDN, lo recomendable es 50% o menos. Llegará el día en que productores y técnicos preguntemos cuanta FDN tiene su pasto y no solo cual es el porcentaje de proteína, que es más fácil de corregir para llegar al nivel de 7.5%, por debajo del cual se afecta el consumo voluntario. Digestibilidad y consumo voluntario definen el valor nutritivo de un pasto con más precisión que el contenido proteico.

Por:
Lidio Martinez Cairo
Especialista en Pastos y Forrajes.