*PRINCIPIOS BÁSICOS PARA ENTENDER EL NEGOCIO GANADERO*
La Republica Dominicana es un país tropical, que se
caracteriza por mucho calor y humedad en la mayor parte de su territorio, pero
hay una tendencia entre una parte importante de los ganaderos a introducir
genética bovina importada de países fríos, entendiendo que el comportamiento y
la producción de esos animales se puede
extrapolar exitosamente. Esto trae como
consecuencia que esos animales vivan
estresados, porque no resisten la temperatura y la humedad imperantes en el país,
lo que les impide expresar su potencial productivo, en carne o en leche, con el
agravante de que su vida útil es muy corta. Aunque es preciso aclarar que hay
algunas zonas que por su altura, o por estar en lugares secos con humedad
relativa baja, tienen mejores condiciones para criar ganado europeo con
relativo éxito, tal es el caso de SAJOMA, MONCION, JARABACOA (500 msnm), POLO y
CONSTANZA (1200 msnm), y en SABANETA, que aunque está por debajo de 150 msnm, tiene humedad relativa
más baja que la media del país. El límite del ITH para que un animal se sienta
confortable es 78 (franja amarilla de la gráfica), por encima de ese valor
entra en estrés.
La temperatura disminuye 0.5 grados centígrados por cada 100
metros de altura, por eso en los lugares mas altos es mas viable para el ganado
europeo, aunque mas que la temperatura el mayor inconveniente es la humedad
relativa, ya que con humedad relativa alta la sensación térmica es mayor y hace
que los animales entren en estrés.
Indice Térmico y Humedad (ITH).
De ningún modo esto quiere decir que no se introduzca
genética de países con clima mas favorable para el ganado que el nuestro, pero
si hay que saberlo hacer. Debemos iniciar con ganado rustico y adaptado (razas
cebuinas, criollo, Romana Red, o con Senepol), y luego hacer los cruzamientos
de lugar hasta donde el clima y el terreno lo permitan.
El orden lógico para establecer una ganadería sustentable y rentable en el tiempo
debe iniciar conociendo las cualidades del terreno y el tipo de clima.
Debemos conocer la topografía, calidad y tipo de suelo, régimen pluviométrico,
variación de temperatura a lo largo del año, disponibilidad de fuentes de agua,
etc. La calidad de suelo se determina
enviando muestras de terreno a un laboratorio de suelos, donde podemos obtener
informaciones tales como Ph, minerales disponibles y faltantes, materia orgánica,
y su composición desde el punto de vista físico.
Luego de tener toda esa información, el próximo paso es
determinar cuáles variedades de pastos tienen el potencial de adaptarse mejor a
las condiciones de nuestro terreno, sin tener que hacer enmiendas para que
prosperen, porque de ser necesario aumentarían los costos y el negocio pudiera
no ser rentable.
El siguiente punto es elegir la(s) raza(s) de ganado que
mejor se adapta(n) a las condiciones climáticas, y de pastos y forrajes
disponibles, de acuerdo al tipo de explotación que nos interese, o sea, leche,
doble propósito, o carne.
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Toro criollo Dominicano (CIMPA) |
“Primero hay que cultivar el pasto que se adapta al suelo, y
luego seleccionar las vacas que se adapten al pasto”
Muchos de los ganaderos dominicanos no han logrado entender estos
conceptos y comienzan al revés, es normal que elijan primero el tipo de ganado
que le gusta, siembran el tipo de pasto que le parece mejor, sin tomar en
cuenta la calidad del suelo, el régimen pluviométrico, la temperatura y humedad
disponibles, por lo que muchas iniciativas ganaderas terminan arruinadas por
falta de rentabilidad.
Por ejemplo, si lo que tenemos es un terreno acido, con
clima cálido y húmedo, las variedades de pasto que más prosperan son las
brachiarias, que se caracterizan por tener bajos niveles de proteína y energía.
Lo más sensato es elegir razas de ganado rusticas y adaptadas (aunque menos
productivas), debido a que estos pueden producir moderadamente sin más
requerimientos de los que le puede dar ese pasto. En cambio, si insistimos en tener animales de
alto rendimiento en ese tipo de ambiente, tendremos que suplementar con grandes
cantidades de alimentos que no producimos en la finca, y el costo de operación
y mantenimiento se eleva mucho hasta llegar a la insostenibilidad financiera.
Ganado mestizo pastando (Hacienda El Mamey).
Otro aspecto que debemos mejorar es no seleccionar genética
pura y simplemente por los índices de producción que aparecen en los catálogos,
la selección debe ir mas allá, debemos saber bajo qué ambiente y bajo que
manejo se lograron esos datos. A
nosotros nos conviene seleccionar animales eficientes al pasto, ya que este es
el alimento mas barato y que nosotros podemos producir en la finca. *Debemos
entender que la vaca que mas produce necesariamente no es la mas rentable ni la
que nos conviene*
Luego de haber hecho lo correcto en la selección del pasto y
del tipo de ganado, el siguiente desafío es manejar correctamente el
pasto, los animales y su sanidad.
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Becerro mestizo Senapol en Sistema Silvopastoril. |
Lo más importante es lo que sobra al final del mes (o del
año), luego de descontar los gastos a los ingresos recibidos. “El producir mucha leche
o carne sin rentabilidad es vanidad, pero el producir volúmenes moderados y
sostenibles con rentabilidad es sensatez”.
Afortunadamente hay muchos jóvenes que se están iniciando en
la ganadería con buen pie, con buena información, sin tener que vivir las malas
experiencias que hemos pasado una gran parte de los productores
Gracias por las informaciones Dios le siga bendiciendo
ResponderEliminarEspero que el artículo le haya sido de provecho.
EliminarDebemos cambiar el hábito de cómo criamos el ganado. Hay punto k son cierto. Pero el ganado europeos necesita invernadero y tabulación para ser rentables RD
ResponderEliminarEl ganado puro europeo no es rentable en RD, ni en ningún país con clima tropical.
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